sábado, 20 de noviembre de 2010

Prometeo en la música

Beethoven - Las criaturas de Prometeo


Esta obra de Beethoven da otra imagen de lo que es o debe de ser Prometeo.

La idealización que como siempre hace Beethoven de las cosas, le lleva en este caso de Prometeo, a desarrollar en la escena a un servidor de los dioses que con el fallo de traspasar las fronteras de la confianza con sus dioses mayores, lleva su propósito de crear sus "criaturas" con la ayuda de Apolo, Pan, y otros personajes de la liosa y enredadora mitología Griega.

Con la Llama Divina las estatuas creadas por Prometeo toman vida, pero se da cuenta de que sólo toman vida, esto es, no tienen ni razonamiento ni sentimiento ni nada; no tienen Alma. Así que decide destruirlas. Antes de eso presenta su "creación" ante la divinidad de Apolo, para que este las instruya en las artes y las ciencias. Así, las criaturas, de nombre Euterpe y Anfión comienzan a jugar por todas partes.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Prometeo y Hulk (analogía)

Lo que a continuación se ofrece no es en sí un cómic de tema griego, sí que hay en éste una referencia directa a un mito griego de gran tradición: el de Prometeo (incluso se cita a Pandora) Se establece una analogía entre Prometeo y Hulk. Ambos son inmortales. Ambos sufren el ataque de animales que devoran su carne. Ambos tienen capacidad para que sus heridas se regeneren rápidamente. Ambos tienen en su invulnerabilidad una condena perpetua.
Prometeo es, en la mitología griega, un titán, que roba el fuego a Zeus para entregárselo a los hombres. Pero es descubierto y castigado por ello: encadenado a una roca en el Cáucaso, todas las noches un águila le roía el hígado, que se le regeneraba constantemente. Heracles lo liberó.
Este episodio de la mitología griega se narra en la trilogía del poeta trágico Esquilo Prometeo portador del fuego, Prometeo encadenado y Prometeo liberado. De las tres sólo nos queda la segunda.

El titán bienhechor de la humanidad, en su figura de condenado, encadenado y sacrificado por favorecer a los seres humanos, ha parecido a algunos exégetas cristianos una prefiguración de Jesucristo.

Hulk es el alter ego de la ira y la rabia que dentro de sí lleva el doctor Bruce Banner. Cuanta más ira acumula Hulk, más fuerte se hace. En este cómic del que se extrae la referencia mitológica, la humanidad ha desaparecido tras una guerra nuclear, sólo Banner-Hulk sobrevive. Pero Banner, ya anciano, se siente enfermo y débil aunque Hulk no permite que muera. A su vez, Banner es incapaz de llevar dentro de sí a Hulk, pero no consigue alcanzar su descanso eterno.


Banner y Hulk entran en una lucha personal encarnizada, el uno por descansar en paz y liberarse de su carga; el otro por sobrevivir a toda costa. De vez en cuando, un ejército de cucarachas (único animal superviviente de la guerra nuclear) ataca a Hulk y lo devora, pero su carne, sus músculos, todo su cuerpo se regenera para seguir viviendo.

hulk-2-para-blog.jpg

sábado, 6 de noviembre de 2010

Un desafío a los dioses.

Tal y como hemos visto en Prometeo, se produce una lucha entre dioses y humanos, hecho que se refleja en "Furia de Titanes". Y no solo ello, Perseo, el protagonista, tiene un cierto aire "a lo Prometeo". Hijo de un dios (Zeus), es criado por unos humildes pescadores, pero tras la muerte de estos y de su hermana por culpa del dios del inframundo (Hades), Perseo comienza a acumular un gran odio por los dioses hasta el punto de que decide posicionarse a favor de estos en su lucha contra los dioses, a pesar de que él mismo es uno de ellos. Me recuerda un tanto a Prometeo, que a pesar de ser un dios lucha en contra de los dioses por concederles una serie de privilegios a los humanos. Otro aspecto a destacar es la aptitud desobediente de los humanos, los cuales desafían totalmente a los dioses hasta el punto de afirmar que ellos son los dioses en la tierra. Totalmente cegados destruyen estatuas de Zeus y se niegan a obedecer el criterio de los dioses, alegando que son superiores a ellos. Reflexiones a tener en cuenta si comparamos esta idea expuesta en la película con el caso de Prometeo. Su sacrificio por los hombres lo llevó a enfrentarse a los demás dioses y a recibir un castigo de estos, y aún así los humanos le pagan con la osadía de negar su esfuerzo y pensar que todo lo que poseen es gracias a ellos. Desde luego que nosotros somos el águila. No hay peor castigo que la traición de aquellos a los que ayudó.